En la mayoría de industrias, y desde hace ya casi 100 años, el plástico era el material por excelencia a la hora de envasar y embalar un producto, incluso alimenticio o de salud.
Pero, los tiempo van cambiando. El planeta se está dañando gravemente por culpa de la contaminación de plásticos quemados y su impacto nocivo de gases en la atmósfera; y su acumulación de residuos, ya que es casi imposible que se pueda descomponer por sí solo, por lo que está presente en masa en océanos, en tierra e incluso en el aire.
El plástico tarda en descomponerse hasta 500 años, lo que supone un problema de residuo importante.
Dada la concienciación ciudadana cada vez mayor por el problema del medio ambiente en cuanto a residuos plásticos y su toxicidad en sus combustión, las empresas han decidido por crear y fabricar envases y embalajes sostenibles para sus productos, dada la alta demanda de sus clientes.
¿Qué es el envasado sostenible?
El envasado sostenible es aquel que ayuda al mantenimiento positivo del medio ambiente o, que por lo menos, no lo dañe más.
Para ello, existen principalmente tres tipos de envases sostenibles que las empresas están ya incorporando en sus cadena de montaje, o que próximamente ya están por incorporar. Estos son:
Tipos de envases sostenibles para las empresas
1. Envases reutilizables
Diferentes materiales de diversos productos dispares, son empleados para crear unos envases nuevos.
Por ejemplo, el cartón o los textiles, junto con algunos plásticos, pueden unirse en una línea de reciclado para crear nuevos materiales. Éstos, después serán enviados a la línea de producción de envases, para crear unos nuevos y sostenibles.
Esto permite darle otra vida a cada material, diferente al que era originariamente.
2. Envases reciclables
Existen muchos productos cuyo el plástico ha sido muy relevante en el el envasado de sus productos. En vez de crear envases nuevos, han optado por reciclar aquellos que ya habían creado anteriormente o mediante otros productos de iguales materiales.
Para ello, se crea una línea de reciclado de envases desechados por los consumidores en diferentes contendedores ubicados para ese fin.
Estos envases que ya no sirven, son después llevados a una planta de reciclado, donde compacta su composición para luego pasar por la línea de producción de envasado nuevo y reciclado.
De esta forma, se reducen los residuos por envases desechados y se evita la producción de nuevos creados a partir del petróleo.
3. Envases de origen vegetal
Los materiales derivados de la materia orgánica de origen vegetal, como el almidón de maíz, champiñones, algas marinas y caña de azúcar, son aprovechados para crear nuevos envases para las productos de las empresas, siendo sostenibles y muy respetuosos con el medio ambiente.
También, las fibras de las plantas son cada vez más aprovechables, sobre aquellas que provienen de restos de podas.
Suelen mezclarse estos materiales con plásticos biodegradables para poder crear más opciones.
4. Envases biodegradables o sin emisiones
Aquellos envases hechos con materiales que se degraden en poco tiempo de forma natural, como los de origen vegetal o natural, son los que más presencia y relevancia van tomando en el mundo del envasado profesional.
Por otra parte, es importante que, si necesita degradarse de forma mecánica, no emita CO2 a la atmósfera, lo cual daña y agranda el agujero de ozono.
Cómo incorporar envases sostenibles en las empresas
Es conveniente realizar mucho I+D para la incorporación de un envase sostenible. Se debe investigar mucho no sólo en las características y posibilidades del envase, sino en su eficacia para proteger y preservar el producto en su interior.
Se debe prestar especial atención a productos alimenticios, de salud, delicados o que no deba entrar la luz, el sol o no pueda estar expuesto a temperaturas dispares.
Además, según como indica la empresa de fabricación de envases Pérez Linares, es conveniente que se incorporen los envases sostenibles en la industria mediante:
- La reducción del tamaño de los envases para usar menos materiales
- Agregando un logotipo o etiqueta «Reciclable» al embalaje actual para que los clientes sepan que el material es reciclable.
- Reutilizando materiales de embalaje siempre que sea posible (especialmente para plásticos).
- Asociándose con fabricantes y distribuidores que han adoptado prácticas sostenibles.
- Planificando adecuadamente los envíos para evitar el transporte aéreo cuando sea posible.
- Y tratando de utilizar fabricantes locales cuando sea posible para reducir la distancia de viaje de los paquetes.
Ventajas de tener envasado sostenible
Existen dos claras ventajas por el que una empresa debería apostar por tener envases sostenibles:
- La ayuda al medio ambiente a su recuperación: al permitir envases que se degradan fácilmente o son reciclados, dan un respiro al planeta y contribuye a su ansiada recuperación, por el bien de todos los humanos y seres vivos que convivimos en él.
- La mejor imagen que consigue frente a sus consumidores: los clientes y potenciales percibirán una concienciación de la empresa frente al grave problema del medio ambiente, lo que incitará a que tenga una mejor imagen y, por ende, un aumento de ventas.
¡Da el salto a los envases sostenibles ahora!